REDACCIÓN - Estos talleres, tanto teóricos como prácticos, tienen como objetivo principal incidir en la importancia de la prevención de riesgos y enseñar a los niños cómo actuar ante una emergencia.

Entre las materias que se ofrecen, destaca la explicación del funcionamiento del teléfono de emergencias 1-1-2. Los voluntarios de Protección Civil utilizan métodos visuales, como canciones o reglas nemotécnicas, para ayudar a los niños a recordar este número. Por ejemplo, realizan un gesto en el que señalan la boca (1), la nariz (1) y los ojos (2), de manera que los pequeños puedan memorizar el 1-1-2 fácilmente. También se les enseña que se trata de un servicio gratuito y único en toda la Unión Europea, y se les explica que sus llamadas son geolocalizables. Además, se imparten clases sobre la regla P.A.S. (Proteger, Avisar y Socorrer).

Para los alumnos de 5º y 6º de Primaria, los contenidos se amplían con técnicas de Reanimación Cardiopulmonar (RCP) y Posición Lateral de Seguridad (PLS), entre otros. En ocasiones, para impartir estas materias relacionadas con la salud, se cuenta con la colaboración del personal del Centro de Salud “Cerro de la Oliva” y con las enfermeras de los centros educativos.

Según el concejal de Seguridad Ciudadana, Emergencias, Movilidad y Transporte, Antonio Rodríguez, "impartir esta formación a los más pequeños tiene como objetivo aliviar situaciones de emergencia, pero sobre todo procuramos concienciarles en estos talleres sobre los recursos que tienen a su disposición para solicitar auxilio".