REDACCIÓN - Majadahonda ha puesto el foco este lunes en uno de sus proyectos sociales más discretos, pero también más transformadores. La alcaldesa, Lola Moreno, ha visitado la sede de Cruz Roja en Majadahonda para conocer de primera mano los avances del programa de inserción sociolaboral que el Ayuntamiento financia mayoritariamente y que durante 2025 ha acompañado a 39 personas en riesgo de exclusión.

La jornada ha tenido un matiz especial: se cumple exactamente el cuarto aniversario de la inauguración de estas instalaciones, levantadas sobre un terreno municipal cedido durante 50 años. Un espacio que, en apenas un lustro, se ha convertido en punto de referencia para la atención social en la ciudad.

Un programa que abre caminos reales al empleo

Gracias al convenio firmado entre el Ayuntamiento y Cruz Roja —dotado este año con 15.000 euros, un 70% del presupuesto total—, vecinos en situaciones de especial vulnerabilidad están recibiendo apoyo para reconstruir sus oportunidades laborales. Entre ellos se encuentran jóvenes, migrantes, mayores de 45 años, parados de larga duración, solicitantes de asilo y otras personas derivadas por los Servicios Sociales municipales.

Las cifras hablan por sí solas: 14 participantes han accedido ya al mercado laboral y otros 8 han completado formación específica, un paso decisivo para mejorar sus posibilidades de empleo. Son avances que, aunque discretos, suponen pequeños giros vitales para quienes llevan tiempo sintiendo que la puerta laboral está siempre entreabierta… o directamente cerrada.

Durante la visita, la alcaldesa —acompañada por la concejala de Bienestar Social, Familia y Mayores, Marina Arines— se interesó por los distintos itinerarios de trabajo que ofrece el programa: desde el diagnóstico individualizado hasta la orientación laboral, la formación y el acompañamiento continuado. También por las ayudas complementarias que facilitan que estos procesos sean sostenibles: transporte, alimentación y apoyos puntuales que marcan la diferencia entre poder seguir adelante o renunciar.

Un puente entre las personas y el tejido empresarial

Además de la atención directa, el programa busca fortalecer un objetivo menos visible: avanzar hacia mercados laborales más inclusivos. Para ello, Cruz Roja facilita el contacto con empresas locales que necesitan personal en ámbitos como el ecommerce, la atención al cliente o la atención sociosanitaria. Sectores donde la demanda existe y donde encontrar perfiles motivados y formados puede ser decisivo.

Moreno destacó durante la visita que el convenio permite “ayudar a las personas más vulnerables para que se desarrollen a todos los niveles y no queden fuera de una sociedad que necesita de su talento”. Una reflexión que subraya el carácter estructural de estos proyectos, alejados del asistencialismo y centrados en generar autonomía.

Cuatro años de colaboración continua

La visita llega en un momento simbólico: la sede de Cruz Roja en Majadahonda cumple cuatro años, desde que abrió sus puertas el 1 de diciembre de 2021. Lo hizo sobre suelo público cedido por el Ayuntamiento, gesto que permitió consolidar un espacio estable para la acción comunitaria y el acompañamiento social.

La colaboración entre ambas instituciones va más allá del programa laboral. A lo largo del año se realizan actividades dirigidas al bienestar de las personas mayores, como las conferencias semanales sobre envejecimiento activo y saludable en el Centro Municipal de Mayores “Reina Sofía”, previstas hasta junio de 2026.

Con esta visita, Majadahonda reafirma su compromiso con un modelo social que apuesta por la inserción, la formación y el acompañamiento continuo. Un trabajo silencioso, a menudo invisible, pero que cada día cambia vidas desde gestos pequeños y oportunidades reales.